La influencia de la moda es muy importante en crear usos y costumbres no sólo en los adolescentes, sino, en todo el mundo en general. Pero no es la moda en si lo que crea habitos y/o influencias, es la sociedad de consumo en general, es el querer tener el CD de tal o cual cantante e ser un fan incondicional, es querer el coche último modelo, el ordenador Tri-pentium, las zapatillas Nikki, etc.,.
Yo te aconsejo que leas el libro de reciente aparición del profesor y ensayista estadounidense, Douglas Rushkoff, se llama: COERCIÓN. POR QUÉ HACEMOS CASO A LO QUE NOS DICEN. Según un reputado diario español, se podría traducir por: Manipulados y manipuladores. En el se desenmascara las estrategias de engaño y control que ejercen actualmente las empresas, los gobiernos, lo smedios y l apublicidad sobre la opinión pública. Un panorama alarmante en el que pocas cosas son lo que parecen y en el que las víctimas somos todos.
Espero que si lo lee, le sea de ayuda.
Un saludo
Rex_Barna
La influencia de la moda es muy importante en crear usos y costumbres no sólo en los adolescentes, sino, en todo el mundo en general. Pero no es la moda en si lo que crea habitos y/o influencias, es la sociedad de consumo en general, es el querer tener el CD de tal o cual cantante e ser un fan incondicional, es querer el coche último modelo, el ordenador Tri-pentium, las zapatillas Nikki, etc.,.
Yo te aconsejo que leas el libro de reciente aparición del profesor y ensayista estadounidense, Douglas Rushkoff, se llama: COERCIÓN. POR QUÉ HACEMOS CASO A LO QUE NOS DICEN. Según un reputado diario español, se podría traducir por: Manipulados y manipuladores. En el se desenmascara las estrategias de engaño y control que ejercen actualmente las empresas, los gobiernos, lo smedios y l apublicidad sobre la opinión pública. Un panorama alarmante en el que pocas cosas son lo que parecen y en el que las víctimas somos todos.
Espero que si lo lee, le sea de ayuda.
Un saludo
Rex_Barna
La influencia de la moda es muy importante en crear usos y costumbres no sólo en los adolescentes, sino, en todo el mundo en general. Pero no es la moda en si lo que crea habitos y/o influencias, es la sociedad de consumo en general, es el querer tener el CD de tal o cual cantante e ser un fan incondicional, es querer el coche último modelo, el ordenador Tri-pentium, las zapatillas Nikki, etc.,.
Yo te aconsejo que leas el libro de reciente aparición del profesor y ensayista estadounidense, Douglas Rushkoff, se llama: COERCIÓN. POR QUÉ HACEMOS CASO A LO QUE NOS DICEN. Según un reputado diario español, se podría traducir por: Manipulados y manipuladores. En el se desenmascara las estrategias de engaño y control que ejercen actualmente las empresas, los gobiernos, lo smedios y l apublicidad sobre la opinión pública. Un panorama alarmante en el que pocas cosas son lo que parecen y en el que las víctimas somos todos.
Espero que si lo lee, le sea de ayuda.
Un saludo
Cuando la moda se centra en un vestuario extravangente, el pelo largo o rapado, aros más o aros menos, es probable que se vaya como llegó. Pero cuando los jóvenes desarrollan conductas antisociales o actúan en contra de los valores, el respeto y la dignidad, están entrando en terreno peligroso.
Autor: Jorge y Norah Zuloaga
Fuente: Desarrollo y Formación Familiar
El pelo excesivamente largo o de plano a rape, pantalones de mezclilla a media cadera, camisetas dos o tres tallas más grandes y un andar desparpajado, parecen ser algunos de los ingredientes del “uniforme” que han adoptado muchos adolescentes.
Ellas no se quedan atrás con sus pantalones de mezclilla muy ceñidos, zapatos con suelas de la altura de un edificio y colores para ojos y labios que no pueden pasar desapercibidos. Y eso, cuando son tranquilos, porque cuando deciden romper el molde, surgen los mechones de pelo en colores fosforescentes, los tatuajes, las arracadas para los hombres y los aretes en el ombligo para ellas.
¿Por qué los adolescentes se sienten tan atraídos por la “moda”? ¿Por qué buscan maneras extravagantes de vestir y de actuar?
Esto no es asunto privado de la época actual, ya que una característica distintiva de los adolescentes de todas las épocas, ha sido la necesidad de encontrarse a sí mismos, de descubrir su identidad.
Para lograrlo, se dejan seducir por las modas, ya que a través de ellas, tratan de marcar una clara diferencia entre su mundo y el de los “niños”, del cual sienten haberse desprendido.
Pero también entre su mundo y el de los adultos, a quienes ven como dinosaurios, aferrados a costumbres y a maneras de pensar y de actuar a años luz de donde los adolescentes se sienten ubicados.
Procedente de la voz latina <<prostituere>> que significa originariamente “deshonrar” o “manchar”, también es conocida con el nombre de “meretricio”.
La prostitución consiste en tener relaciones sexuales con personas extrañas a cambio de dinero u otros objetos de valor. Está implícito que el pago se realiza para obtener una gratificación específica. La prostitución es un servicio que puede ser efectuado por hombres o mujeres a solicitud bien de hombres o de mujeres, tiene lugar en las ciudades de todo el mundo y presenta ciertas características comunes, aunque el número de prostitutas puede variar enormemente de una ciudad a otra que se encuentre próxima a ella.
2.- HISTORIA DE LA PROSTITUCIÓN
El concepto de prostitución a variado tanto según las épocas, como los pueblos y hasta desde el punto de vista jurídico, social y médico. Actualmente el concepto se ha extendido tanto en el campo de las investigaciones que según algunos autores como Wuttke afirman que existe la prostitución incluso en las especies animales.
En el género humano la prostitución se encuentra definida en las antiguas leyes atenienses. Solón su primer organizador le da como caracteres la variedad de individuos a los que se entrega la mujer.
En los tiempos de Roma el concepto se comprueba a través de las palabras de “quaestuosa” o que solicita, y “meretriz” o que comercia. La diferencia entre meretriz y la mujer de prostíbulo es que la primera ejerce su comercio clandestinamente y la segunda lo hace públicamente.
Las inscripciones Pompeyanas y algunos textos legales de su época excluyen del concepto de prostitución a la mujer adúltera o a la mujer que tiene un amante per incluyen a la mujer que mantiene relaciones clandestinamente.
Las leyes de Digesto no hablan para nada de la prostitución masculina hetero y homosexual, tan común sin embargo en la antigüedad, en cambio separa en la prostitución femenina los conceptos de prostituta vulgar ó “mullier quaestuaria” de los de concubina o que vive únicamente con un soltero.
Las ideas cristianas fijaron ante todo el punto de vista de la promiscuidad sexual para caracterizar la prostitución según se ve en una carta de San Jerónimo en la que se define a la prostitución como la que se entrega al vicio de muchos.
El derecho germánico no separó, como el romano, las diversas variedades de comercio carnal fuera del matrimonio, sino que las confundió todas en el mismo concepto limitándolas, sin embargo, a las mujeres libres y no a las esclavas. De estas fuentes legales nacieron las diversas definiciones desde el siglo XVII y que se han recopilado en un sin fin de publicaciones.
Existen indicios de que ya en los tiempos prehistóricos existía la prostitución, según las afirmaciones de algunos investigadores que llegaron a esta conclusión tras la observación de pintura rupestres.
En la Edad Antigua, Solón, político Ateniense creó unas leyes de organización para el estado, el objeto de las leyes solonianas era proteger el matrimonio y evitar el adulterio que castigaba con pena de muerte, las mujeres libres no eran admitidas en la clase de las prostitutas que se reclutaban exclusivamente entre las esclavas extranjeras, éstas debían pagar su contribución al estado en gran parte para la erección del templo de “Afrodita Pandemus”. Sin embargo aparte de la prostitución oficial existía una pribada libre de las HETAIRAS Y CONCUBINAS, cuya frecuentación no tenía nada de vergonzoso ni aún para los casados.
En los tiempos de Roma no se halla reconocida la prostitución hasta el siglo III a. De C, la extensión de la prostitución a Roma se debió al rigor de las leyes contra el adulterio y la seducción, que persistían aún durante el reinado de Augusto. Las guerras y conquistas de los romanos al aumentar enormemente el tráfico de esclavos favorecieron como consecuencia la prostitución. Ésta se ejercía desde la infancia educando a propósito a las destinadas a ella y por cuenta de mercaderes o lenones de ambos sexos, se observaban una serie de condiciones como en un contrato cualquier, pudiendo liberarse las prostitutas por un precio fijo que pagaban sus amantes, se cree que en aquellos tiempos hubo de alcanzar la cifra de aquellas mujeres una proporción mucho mayor que en la actualidad. No solamente en Roma sino en Corinto, Alejandría, Neápolis, Bizancio, Antioquía y Cartago, se contaban innumerables prostitutas, ya en barrios especiales ejerciendo libremente su oficio, generalmente como danzarinas y flautistas. No faltaban fiestas, a veces, con carácter religioso y a las que concurrían aquellas como las célebres Afrodisias y Dionisiacas, Floralias y Bacanales. Las cenas con mujeres de tal condición conservaban el nombre griego de SYMPOSION, eran frecuentes y muy a la moda reconociéndolo autores como por ejemplo Cicerón. También existían algunas costumbres que se asemejaban a las modernas como la de los “Restaurantes galantes” o “Escuelas de Flautistas” Los baños y termas eran asimismo punto de reunión de mujeres galantes y de los petrimetres de la época, conocidos por ARDELIONES. En los molinos, las tahonas, tiendas de vinos y aun en las calles y plazas eran comunes las escenas de prostitución por parte de las ALETRIS, ALICARIAE, AMBULATRICES Y NOCTILUCAE. Había templos especiales, como el Isis de Romaque no eran mas que lugar de citas como también lo eran los Pórticos, Anfiteatros, las Arenas y aun los Cementerios conocidos son los lupanares de Pompeya y Herculano o casa de un solo piso, con cinco habitaciones reducidas, alrededor del vestíbulo pinturas e inscripciones obscenas y en la parte alta una sala y diversos aposentos con salida separada por otra escalera todo lo cual daba al lugar una atmósfera pesada, fétida y oscura. Estos lugares no eran constantemente habitados, sino simplemente alquilados de momento existiendo, no obstante, casas de habitaciones permanentemente con sus rótulos en las celdas expresando el nombre de guerra de las mujeres. Se les consentía una serie de adornos sea de joyas o de riqueza de vestidos, predominando los colores púrpura y azafrán, los vestidos transparentes, las cadenas de oro, los pendientes, cinturones todo ello realizado con piedras preciosas. No era raro por otra parte el abuso de bebidas alcohólicas ni tampoco infrecuente el uso de abortivos de toda clase. Los precios podían llegar a ser exorbitantes y tampoco eran raros los grandes regalos como dos colmillos de elefante de l0 pies de largo entregados por el emperador romano Carino a una mujer para que construyera con ellos una cama. En la Edad Media no se rompió con las tradiciones de la antigüedad en lo referente a la prostitución, adoptando, por el contrario, muchos de sus puntos de vista. Se aprecia más bien una transformación gradual que una verdadera reforma en tan importante problema social por parte de los Gobiernos, filósofos y moralistas de la época. Donde más claramente se observa esta continuidad es en el Imperio bizantino, como puede colegirse de los escritos de Procopio y de Miguel Psellos. La capital de los emperadores de los antiguos ofrecía en el barrio de Gálata el aspecto de los antiguos centros de prostitución de Grecia y Roma: lo propio puede decirse de Chipre y de Creta, que se hicieron célebres en este sentido, mencionándolos los viajeros extranjeros como Ibn batuta. La influencia de la prostitución bizantina se hizo sentir, asimismo, con todos sus refinamientos en el mundo musulmán. Las conquistas de los árabes en Siria y Egipto, tuvieron como consecuencia la adopción de costumbres del vencido, y así, la capital islamita de damasco parecíase en un todo a una ciudad griega. En general, la prostitución en las ciudades medievales y especialmente las del Norte, adoptó la forma cerrada de los burdeles, aunque no faltaban casos de la ambulante en forma de danzarinas o tafiedoras de harpa y cítara. Entre los árabes se encontraban tales artistas con el nombre de mumisa , voz derivada del griego mimás, siendo muy celebradas en las poesías árabes como el diván de Mutalami. Los judíos habían mantenido las prohibiciones seculares de los libros sagrados con respecto a la prostitución, aunque la influencia griega se había traducido en una tolerancia muy extensa en la práctica. Flavio Josefo menciona ya la existencia de numerosas prostitutas, por más que no parece hubiera una verdadera organización de las mismas entre el elemento exclusivamente judío. Si el Talmud menciona casos que recuerdan las costumbrs grecorromanas, es sólo por efecto de la influencia de las mismas, existiendo sectas intransigentes como las de los Esenios que vedaban toda relación sexual ilícita. La sociedad cristiana no adoptó el punto de vista ascético y por tanto prohibitivo, sino que estableció la tolerancia desde los primeros tiempos, no faltando, con todo, sus protestas y reacciones momentáneamente victoriosas. En general las prostitutas de la edad Media ejercían su comercio como gremio reconocido, figurando en las entradas solemnes de príncipes en las poblaciones festejándoles con ofrendas de flores. No era infrecuente tampoco que las visitasen entonces grandes dignatarios, que, por otra parte, las obsequiaban con regalos para bailes y festejos. Tal ocurrió en Viena durante el reinado del emperador Segismundo en 1435 y en Praga en el del emperador Alberto II. Las ordenaciones acerca del comercio de las prostitutas eran tan comunes como minuciosas, negándoseles, sin embargo, el derecho de ciudadanía a partir del siglo XV. Se las obligaban a usar trajes especiales, separándolas de las mujeres honradas incluso en las tumbas, se les reservaba lugar aparte en las iglesias. No debe olvidarse tampoco que la escasa población y menor riqueza de las ciudades medievales impidieron el lujo y esplendor que acompañó al desarrollo de la prostitución en Grecia y roma. Sólo en el Oriente Bizantino e islamita se hallan ejemplos que recuerdan los de las modernas urbes mundiales en esta parte. Donde más parece haber concentrado el ejercicio de la prostitución es en las grandes villas universitarias, como Padua, Florencia, París, Heidelberg, Oxford y Salamanca.
Los moralistas no cesaron de clamar contra esta proximidad, cual lo demuestran en el siglo XIII las invectivas de Jaime de Vitry. Lo propio se observa en Italia por parte de Eneas Silvio y del Panormita, condenando la inmoralidad de los estudiantes de Siena. Era deber de los rectores vigilar que los estudiantes no salieses de noche para evitar la frecuentación de tales mujeres. Sin embargo, tales disposiciones eran poco respetadas, renovándose sin cesar con los abusos y escándalos, que se venían sucediendo.
La influencia de la prostitución ambulante en las ferias y mercados es uno de los rasgos característicos de esta época que excedió considerablemente a la antigüedad en tal concepto. Lo propio puede decirse de las grandes fiestas populares, como las de los Santos, de Pascua y Carnaval, de los torneos, de las cortes, peregrinaciones y romerías.
En cuanto a las grandes expediciones militares, como las de las Cruzadas, no hay que decir que los puertos de mar, como Hamburgo, Venecia, Nápoles y Lisboa, eran un centro de una enorme prostitución, como lo atestiguan las poesías de la época. No poca influencia ejercieron también en ella las gentes de condición servil, que no dejaron de existir en toda la Edad Media. Así, en Bizancio, a pesar de las prohibiciones de la emperatriz Teodora, hubo un gran tráfico de esclavas, lo propio que en Italia y en Grecia, no obstante renovarse los edictos persiguiendo tan vergonzoso trato. En las mancebías estaban tratadas las mujeres como verdaderas esclavas, y lo propio acontecía en todo el Oriente musulmán, lo que se refleja en la literatura de aquel tiempo.
En la Edad Moderna, a pesar de la influencia del Renacimiento y del descubrimiento de América, pocas modificaciones introdujo en tal estado de cosas. La aparición del terrible mal gálico o de Nápoles, coincidió con las guerras de Italia que trajeron como consecuencia la diseminación por todo el continente de las prostitutas de aquel país. Las obras de buenaventura-Desperiers, lo propio que la de Béroalde de Verville, enseñan hasta que punto la moda italiana se había enseñoreado de Francia, y otro tanto puede decirse de España, donde todo los transalpino hallaba acogida favorable. Las regulaciones introducidas para combatir el contagio venéreo, se tradujeron en reglamentos contra la prostitución, que no hacían más que repetir los antiguos. Aquella triunfaba en realidad, no ya en las grandes ciudades solamente, sino en las mismas cortes, como de ello dan ejemplo la disolución de la de los Valois y los Médicis. El fausto y la ostentación de las favoritas de los monarcas y magnates, como Diana de Poitiers, Gabriela d' Etrées y tantas otras, no eran para desarraigar el vicio cada día más extendido. Las riquezas del Nuevo Mundo, aumentando las que ya existían por el comercio de Oriente, hicieron crecer el número de mujeres galantes, figurando en ellas sin pudor alguno, incluso damas de renombre en Italia. El siglo XVII no sólo presenció la prostitución femenina, idealizada, por decirlo así, en la persona de Marión Délorme, sino que toleró el escandaloso espectáculo de la prostitución masculina, como de ello ofrecen ejemplo los meninos de Luis XIII y las anécdotas de Taillemant des réaux. Ningún país se vió libre de tales escenas, que verdaderamente subieron de punto en el reinado de Luis XIV y la Restauración inglesa. Las pinturas del conde de Gramont, las obras festivas de Quevedo y las sátitras de Pope y Prior demuestran lo escandaloso de la prostitución en todas las esferas sociales.
Lo propio cabe decir del siglo XVIII, inaugurado con la corrupción de costumbres de la regencia. Felipe de Orleans y el duque de Borbón precedieron sólo en sus liberalidades a las favoritas a los días de Luis XV y del Parque de Ciervos. Si a veces una feliz casualidad hacía cuando menos dorar por los esplendores del arte la bajeza del vicio en regias amantes, como la marquesa de Pompadour, las más de las veces no conducía sino a ruinosas prodigalidades. De ellas dieron ejemplo con sus mancebas el rey Augusto de Sajonia y el célebre ministro conde de Bruhl, que consumieron las rentas de sus estados.
La condición del promedio de las prostitutas no había variado mucho, sin embargo, viviendo la mayor parte de ellas en la mayor miseria, tiranizadas sus amas y sujetas a la arbitrariedad de la policía. Si en algún país, como Inglaterra, escapaban a la vigilancia gubernativa, por no existir legalmente en esta parte, su estado no era mejor en el fondo. De ello dan ge las comedias de Gay y las sátiras y libelos de la época, como los de Jonhson y Francis.
Entre las gentes acaudaladas y la clase nobiliaria el hábito de las cenas galantes contribuyó en gran manera a difundir la prostitución con apariencias más cautivadoras e inofensivas. Sin embargo, el número de mujeres entretenidas era verdaderamente asombroso en las grandes capitales, algunas de las cuales, como Venecia y roma, no eran más que centros de cortesanas, como se ve en las obras de Rousseau y de Casanova.
La tormenta revolucionaria francesa no acabó con la prostitución, como de ello dan ejemplo las obras históricas de los Goncourt, y sabido es el alcance que tomó durante el directorio, donde se plagiaron a su manera las costumbres grecorromanas.
Consolidada ya la paz europea y con el advenimiento de un nuevo estado de cosas, cesaron los escándalos de prostitución en las altas esferas, pero no por ello dejó de existir en otra forma. La fama de las entretenidas y mujeres galantes francesas, tan popularizada en las obras de dumas y de Murger, fue vervaderamente universal. La idealización del tipo de la pecadora por amor comenzada en la Manou Lescant y renovada en la Dama de las camelias, dio nuevos aspectos al problema social que estudiamos. Sea como quiera, la organización de las prostitutas no varió en lo esencial a pesar del cúmulo de reglamentaciones en todos los países, hasta llegar a la ausencia completa de ellas, como en la América del Norte. En cuanto a las dilapidaciones y prodigalidades con tales mujeres no dejaron de existir, alimentando la crónica escandalosa de la época, como lo atestiguan los nombres de Lola Montes y de Cora Pearl.
La prostitución de menores, la única perseguida por la ley, iba tomando, sin embargo, nuevos vuelos; no cesando de clamar contra ella los moralistas de todos los países. Acerca de la prostitución entre los pueblos primitivos, hay que distinguir, ante todo, entre prostitución como plaga social, en el sentido que se le da comúnmente en nuestros días, y prostitución de carácter religioso, tal como existió en algunas de las civilizaciones primitivas, como Egipto, Fenicia y Babilonia.
El terrorismo, como táctica, es una forma de violencia política que se distingue del terrorismo de estado por el hecho de que en éste último caso sus autores pertenecen a entidades gubernamentales. Se distingue también de los actos de guerra y de los crímenes de guerra en que se produce en ausencia de guerra.[3] La presencia de actores no estatales en conflictos armados ha creado controversia con respecto a la aplicación de las leyes de guerra.
La palabra "terrorismo" se encuentra política y emocionalmente cargada, y esto dificulta consensuar una definición precisa.
Es común el uso de la palabra por parte de gobiernos para acusar a sus opositores.[4][5] También es común que las organizaciones e individuos que lo practican rechacen el termino por injusto o impreciso.[6] Tanto los unos como los otros suelen mezclar el concepto con la legitimidad o ilegitimidad de los motivos propios o de su antagonista. A nivel académico se opta por atender exclusivamente a la naturaleza de los incidentes sin especular sobre los motivos ni juzgar a los autores. Algunos medios de comunicación como la BBC, que desean enfatizar su imparcialidad, sugieren en sus guías de estilo evitar el término terrorista y terrorismo.[7][8] El Diccionario de la Real Academia Española, en el avance de su vigésima tercera edición modifica la anterior incluyendo una tercera acepción, define el término «terrorismo» como:
Terrorismo 1. m. Dominación por el terror. 2. m. Sucesión de actos de violencia ejecutados para infundir terror. 3. m. Actuación criminal de bandas organizadas, que, reiteradamente y por lo común de modo indiscriminado, pretende crear alarma social con fines políticos.[9]
El DRAE también recoge dos acepciones para la palabra «terrorista»,[10] a saber:
Terrorista 1. adj. Que practica actos de terrorismo. Apl. a pers., u. t. c. s. 2. adj. Perteneciente o relativo al terrorismo.
El Código Penal Argentino establece en su artículo 213 ter. sancionado en 2007 que solo podrá considerarse autor del delito de terrorismo al que:
«...tomare parte de una asociación ilícita cuyo propósito sea, mediante la comisión de delitos, aterrorizar a la población u obligar a un gobierno o una organización internacional, a realizar un acto o abstenerse de hacerlo, siempre que ella reúne las siguientes características: a) Tener un plan de acción destinado a la propagación del odio étnico, religioso o político; b) Estar organizado en redes operativas internacionales; c) Disponer de armas de guerra, explosivos, agentes químicos o bacteriológicos, o cualquier otro medio idóneo para poner en peligro la vida o la integridad de un número indeterminado de personas.»[11]
«Los que perteneciendo, actuando al servicio o colaborando con bandas armadas, organizaciones o grupos cuya finalidad sea la de subvertir el orden constitucional o alterar gravemente la paz pública, cometan los delitos de estragos o de incendios tipificados en los Artículos 346 y 351, respectivamente, serán castigados con la pena de prisión de quince a veinte años, sin perjuicio de la pena que les corresponda si se produjera lesión para la vida, integridad física o salud de las personas.»
Los EE. UU. desde 1983, con propósitos estadísticos y analíticos, han utilizado las siguientes definiciones referentes al terrorismo que se recogen en el Título 22 del Código de los Estados Unidos, sección 2656f(d)
«Terrorismo: Violencia premeditada y con motivos políticos perpetrada contra objetivos civiles por grupos subnacionales o agentes clandestinos, generalmente con la intención de influenciar a un público determinado.»
Asimismo, según Pedro Carrasco Jiménez, aplicando una perspectiva sistémica y, con la intención de alcanzar una definición del terrorismo que sea general, global, precisa y sencilla, propone definir el terrorismo como:[12]
«la acción violenta ejecutada por personas al servicio de una organización, con la intención de infundir miedo a un sector de la sociedad, y utilizar este miedo para tratar de alcanzar un fin político.»
Por su parte, Fernando Reinares ha definido el concepto específico de terrorismo internacional, como el que:[13]
«en primer lugar, ... se practica con la deliberada intención de afectar la estructura y distribución del poder en regiones enteras del planeta o incluso a escala misma de la sociedad mundial. En segundo término, aquel cuyos actores individuales y colectivos hayan extendido sus actividades por un significativo número de países o áreas geopolíticas, en consonancia con el alcance de los propósitos declarados»
1.-Trabajo infantil La infancia es un tiempo para jugar, aprender, crecer, un tiempo en que todos los niños y niñas deberían tener la oportunidad de desarrollar sus potenciales y soñar con brillantes planes para el futuro. Sin embargo, para 250 millones de niños y adolescentes en todo el mundo, quienes trabajan mucho antes de que sus frágiles huesos y sensitivas almas están preparados, la infancia es un sueño perdido. Ellos trabajan desde las primeras horas de la mañana hasta después del ocaso. Se les puede ver vendiendo flores y goma de mascar a turistas en las calles de ciudades ruidosas y sobre pobladas; quemándose bajo el sol en plantaciones gigantescas, sucias, e infectadas de residuos químicos; barriendo los pisos de las mansiones de millonarios inconscientes; doblándose las espaldas en oscuras fábricas de alfombras bajo el látigo de la esclavitud moderna. Estos niños y niñas no saben de otro juego que no sea la sobre vivencia. Su escuela es la calle; su maestro, la injusticia. Su futuro es un negro callejón de incertidumbre que podría acabar con sus vidas en cualquier momento. Por este motivo, quisimos profundizar este tema que hoy en día, en nuestro país como en el resto del mundo, es uno de los principales cuestionados. En primer momento el estudio se centra en el niño, con el objetivo de conocer las actividades que realizan y lograr su caracterización de acuerdo a las siguientes variables: edad, sexo, escolaridad, zona de procedencia, zona de frecuencia, composición de la familia a la cual pertenecen. Los niños de hasta 15 años son tomados como unidad de análisis especialmente nos profundizamos en la provincia de San Juan.
2.-Las condiciones de pobreza El ingreso precoz al trabajo infantil se encuentra vinculado a las condiciones de pobreza de las familias. Las familias pobres estructurales y las familias empobrecidas ante la situación de ajuste económico, son colocadas en condición de vulnerabilidad social, esto es que pierden su capacidad económica y cultural de contención. Esta situación vulnerabilidad se presenta exclusión social, donde disminuyen las posibilidades reales de alcanzar niveles de vida dignos. De esta forma los niños y niñas realizan en la calle diferentes actividades como forma o estrategias de supervivencia, que desarrollan como una manera de generación de ingresos. Las actividades que realizan los niños para obtener ingresos solos o integrados a su núcleo familiar, son asimilables a la idea de trabajo. El concepto de trabajo infantil no es tan sencillo ni claro como parece. Los niños ayudan a las familias, pero estas actividades no se denominan trabajo infantil, se aplica más bien a aquellas labores desempeñadas por menores en condiciones más o menos regulares que les permite ganarse el sustento para sí mismo y sus familias. La noción de trabajo infantil debe aplicarse a niños de menos de 15 años de edad que realizan actividades con el objetivo de ganar el propio sustento o el de sus familias. 3.- Actividades que realizan los niños y niñas como formas o estrategias de supervivencia.
" Son muchos los casos de los chicos que trabajan, pero son
diferentes los casos, hay unos que son las madres separadas,
o que los esposos las golpean a las mujeres y a los niños, entonces
si no traen plata los hacen dormir afuera, pero mire hasta donde
llega la desesperación, a algunos chicos los mandan a sacar plata
de la iglesia, donde está la Virgen afuera en la plaza, en la fuente,
donde la gente tira monedas." ( Rubén 15 años, comenzó a trabajas
a los 8 años).
La incorporación de éstos, a temprana edad, a algún tipo de actividad económica de manera independiente o vincula a la organización de su núcleo familiar está asociada a la situación de pobreza. Ya sean familias en situación de pobreza u hogares vulnerables en situación próxima a la pobreza.
Los niños se incorporan a una variada gama de tareas, desempeñándose en actividad laborales en la economía formal o bien como trabajadores por cuenta propia en ocupaciones callejeras. Muchas de estas actividades se encuentra en el límite de lo permitido o de lo prohibido y forman parte del multifacético mundo del trabajo infantil. Y la calle se transforma en el lugar cotidiano de vida de estos niños. Estas actividades son por ejemplo la limpieza de veredas, de jardines, la venta callejera, el cirujeo y la práctica de la mendicidad, etc.
4.- Ganancia y destino del dinero El dinero que obtienen por su labor varía según las actividades que realizan. Rara vez perciben un ingreso que se aproxime al salario mínimo, sus remuneraciones son tanto en dinero como en especie. En el caso de las ventas callejeras y prestaciones de servicio, actividades que suelen realizarse combinadas, la ganancia depende de las posibilidades de venta de los productos. "Algunas veces nos pagan $2, cuando limpiamos la cuneta nos dan $1, cuando limpiamos las veredas también nos dan $1, y cuando subimos a los árboles para bajar las hojas y y después las recogemos nos dan $2." ( Yésica 12 años)
" Vendo, si no si no quieren, porque a veces no tienen me dan comida para llevar, o me dan ropa" ( Cintia 7 años)
Aquellos que se dedican a la venta de frutas y verduras lo hacen en puestos callejeros o municipales con la compañía de adultos familiares. La ganancia recibida por los adultos, son trabajadores familiares impagos, suelen recibir algunas monedas para gastos, dinero que los chicos consideran su ganancia.
En el caso del trabajo en supermercados e hipermercados, la reducción diaria depende de la actividad que realicen, como changarines reciben propinas. Aquellos que tienen la buena suerte y logran ser aceptados como repartidores o descargadores pueden tener un sueldo fijo.
" Yo vivía con mis abuelos, yo tuve que empezar a ayudar en casa. Mi abuela me levantaba temprano para eso, era como si me corriera, me decía "no te vas a quedar dormido anda a trabajar"" Tenía 7 años.
" Cuando yo no le daba toda la plata se enojaba, empezó a cambiar mas todavía, me pedían plata para la comida y después me negaban un plato de comida"
" A veces tenía miedo si no hacía plata, porque si no llevaba plata me reprochaban o no me daban de comer, no te lo has ganado me decía
El viento, las olas y toda la dinámica natural nos muestran la compleja interrelación que existe entre la litosfera, hidrosfera, atmósfera y biosfera. Gran parte de esa dinámica es casi imperceptible, como la erosión o la sedimentación, producidas por el viento, los ríos, los glaciares, etcétera. En cambio, en otros casos, el comportamiento de los elementos naturales es violento, como los movimientos sísmicos y las erupciones volcánicas, que ponen en riesgo las sociedades, sus bienes o sus actividades.
Un movimiento sísmico, un huracán o cualquier otro fenómeno extremo de la naturaleza se convierte en desastre o catástrofe cuando ocasiona pérdidas humanas o económicas. Es decir, se denomina desastre natural sólo cuando el problema social o económico es detonado por un fenómeno de la naturaleza. loe Golden dice “un peligro latente se convierte en desastre si ocurre donde vive gente”.
Las consecuencias de los desastres naturales no deben mirarse únicamente desde el punto de vista de las vidas que se pierden, sino también desde el punto de vista económico, pues constituyen un obstáculo para el desarrollo económico y social de la región, especialmente en los países en desarrollo. En ellos, un desastre puede ocasionar una reducción del producto nacional bruto por varios años, por ejemplo, una inundación arrastra la capa fértil del suelo y tarda años en recuperarse. Se ha calculado que las pérdidas del producto nacional bruto debidas a los desastres pueden ser, en proporción, 20 veces mayores en los países en desarrollo que en las naciones más adelantadas.
La FAO ha calculado que la sequía registrada en los años 70 en El Sahel (África) redujo a la mitad el producto nacional bruto (PBN) de los países del área:Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania, Níger y Senegal.
Los desastres pueden tener consecuencias tardías, es decir que sólo se pueden evaluar a lo largo de varios años. Una sequía o una inundación puede afectar la economía de la región o de un país de manera tal que repercuta en la calidad de vida o la salud de su población por varios años. Según la Oficina del Coordinador de las Naciones Unidas para el Socorro en Casos de Desastre (UNDRO), las inundaciones registradas en 1972 en Filipinas, retrasaron los esfuerzos de desarrollo del país entre tres y cinco años.
Una causa importante de la lentitud en la recuperación y reconstrucción de los países en desarrollo después de un desastre, es porque no cuentan con tantos bienes asegurados como los países desarrollados. El huracán Andrew, que azotó a Estados Unidos en 1992, ocasionó 30.000 millones de dólares de pérdidas, pero el 75% corrieron a cargo de compañías aseguradoras. En cambio, las inundaciones y deslizamientos de tierras que asolaron China en 1996, provocaron un perjuicio económico de 24.000 millones de dólares, pero sus seguros no alcanzaron al 2% de las pérdidas.
Además, pasado el fenómeno, las víctimas no sólo necesitan ayuda material sino también apoyo psicológico: hay estudios que demuestran el aumento de los estados depresivos, de consumo de alcohol y hasta el incremento de la tasa de suicidios.
Un punto a tener en cuenta es que los desastres o catástrofes originados por fenómenos naturales son cada vez mayores y acarrean pérdidas millonarias; aunque los científicos que observan, registran y analizan la dinámica natural afirman que la frecuencia de los casos extremos no ha aumentado considerablemente. Esto se debe en gran parte al aumento de la población mundial y de la pobreza, pues el dónde y el cómo construye el hombre sus viviendas puede agravar los riesgos tanto físicos (lesiones y muertes) como sociales y económicos, que son de lenta recuperación.
En la actualidad, al menos un cuarto de la humanidad vive en zonas vulnerables a los desastres, sobre todo en los países en desarrollo. En ellos, la gente asienta sus viviendas en lugares propensos a sufrir estas catástrofes, por ejemplo en las laderas de las montañas, donde los aludes pueden arrastrar pueblos enteros, como sucedió en El Nevado del Ruiz (Colombia), o en los cauces de ríos, que cuando aumentan su caudal, desbordan y producen graves inundaciones.
Otro elemento a tener en cuenta es que muchas de las acciones de los seres humanos como la deforestación y la contaminación agravan los efectos de los fenómenos naturales. Las selvas taladas de las laderas de las montañas favorecen las avalanchas o aludes, cuyos sedimentos rellenan los cauces de los ríos, haciendo que desborden con mayor frecuencia.
CLASES DE DESASTRES NATURALES
Se han clasificado más de 20 riesgos capaces de producir desastres. Abarcan desde terremotos hasta nieblas y brumas, pero los más importantes son:
Hidrológicos: oleajes tempestuosos, tsunamis
Meteorológicos: inundaciones, huracanes, ciclones, tifones, tornados, sequías, heladas, granizadas, olas de frío o de calor, nevadas o temporales de invierno.
Geofísicos: movimientos sísmicos y vulcanismo, avalanchas, derrumbes, aluviones, aludes.
Biológicos: marea roja (aparición en la superficie de las aguas de mejillones, almejas, etc. que son portadores de toxinas y alteran la cadena trófica)
El amor (del latín, amor, -ōris) es un concepto universal relativo a la afinidad entre seres, definido de diversas formas según las diferentes ideologías y puntos de vista (científico, filosófico, religioso, artístico). Habitualmente se interpreta como un sentimiento, relacionado con el afecto y el apego, y resultante y productor de una serie de emociones, experiencias y actitudes. Con frecuencia el término se asocia con el amor romántico. Su diversidad de usos y significados, combinada con la complejidad del sentimiento implicado en cada caso, hace que el amor sea especialmente difícil de definir de un modo consistente. Las emociones asociadas al amor pueden ser extremadamente poderosas, llegando con frecuencia a ser irresistibles. Con todo, el amor interpersonal se considera sano o «verdadero» cuando es constructivo para la personalidad, para lo cual es indispensable tener una buena autoestima.
«Amar es encontrar en la felicidad de otro tu propia felicidad».[1]
Como concepto abstracto, el amor se considera normalmente un sentimiento profundo e inefable de preocupación cariñosa por otra persona, animal o cosa. Incluso esta limitada concepción del amor, no obstante, abarca una gran cantidad de sentimientos diferentes, desde el deseo pasional y de intimidad del amor romántico hasta la proximidad emocional asexual del amor familiar y el amor platónico,[2] y hasta la profunda unidad de la devoción del amor religioso.[3] En este último terreno, trasciende del sentimiento y pasa a ser la manifestación de un estado del alma o de la conciencia identificada en algunas religiones con Dios mismo. El amor en sus diversas formas actúa como importante facilitador de las relaciones interpersonales y, debido a su importancia psicológica central, es uno de los temas más frecuentes en las artes creativas (música, cine, literatura). Desde el punto de vista de la Biología, parece estar relacionado con la supervivencia del individuo y de la especie; según algunos, no es privativo de la especie humana, y también pueden presentarlo otros animales capaces de establecer nexos emocionales.
1. ¿Somos todos iguales? En parte sí, en parte no. En cuanto personas humanas somos iguales. En cuanto a las cualidades somos diferentes. 2. Si dos cosas son diferentes, ¿qué trato es correcto? Si son distintas, es correcto tratarlas de modo diferente. El problema surge cuando son en parte iguales, en parte distintas. Entonces se debe hacer equilibrios tratando igual lo igual, y diferente lo diferente. Por ejemplo, un hombre sin conocimientos de Química no debe ser catedrático de esta asignatura, pero esto no afecta a su dignidad como persona.
3. ¿Cuándo hay discriminación? Hay discriminación si se hace distinción donde hay igualdad, y si esa diferenciación es injusta. No hay discriminación si se distingue lo que realmente es distinto. Tampoco hay discriminación si no se falta a la justicia.
4. Ejemplos donde hay discriminación.- Aquí hay diferencias en algunos aspectos, pero es injusto extender esas cualidades a otros casos.
La mujer es diferente del hombre, pero ambos son seres humanos con los derechos y deberes correspondientes. Si estos derechos fundamentales no se respetan, estamos ante una discriminación.
Un embrión humano es distinto a un niño y a un adulto, pero son personas humanas con todo lo que esto significa. Hay diferencias en deberes y capacidades, pero no debe haber discriminación en cuanto hombres.
Un enfermo es diferente a un hombre sano, y tendrá distinciones laborales, pues realmente cambia su capacidad de trabajo. Pero no son distintos en cuanto personas, y si no reciben un trato humano estamos ante una discriminación. 5. Ejemplos donde no hay discriminación.- Aquí hay diferencias reales, y es correcto distinguir:
La verdad no discrimina al error. Simplemente es lo verdadero. Y lo otro no. Son realmente distintos y es justo distinguirlos.
La bondad no discrimina a la maldad. Simplemente un acto es bueno y otro no lo es. Son realmente distintos y es correcto diferenciarlos.
Quien elige no discrimina. Simplemente elige. Solamente se discrimina si se crea o mantiene una injusticia. 6. ¿Ejemplo de elección justa? Cuando hay libertad de elección, es justo escoger arbitrariamente lo que se desee. Por ejemplo, quien se compra un coche elige el que quiere, sin que esto sea una discriminación para las demás marcas, aunque sean mejores. 7. ¿Cómo se origina una discriminación? Puede haber varios motivos. Tal vez una causa sea la exageración de un aspecto accidental. Ejemplos:
Discriminación racista: se exagera la importancia del color de la piel.
Discriminación nacionalista: se acentúa la importancia de haber nacido en un determinado lugar.
Discriminación cualitativa: entre un recién nacido y un embrión hay diferencias pero no tantas como para matarlo (aborto). Entre un enfermo y un sano hay distinciones pero no exageremos (eutanasia). 8. ¿Discriminación ante el síndrome de Down? Un amigo me pide que añada algo sobre este tema. Estos enfermos tienen unas capacidades reducidas, pero siguen siendo seres humanos, y muy cariñosos por cierto. Se les debe tratar de modo acorde a la dignidad humana. Por ejemplo, el aborto en estos casos sigue siendo un crimen. El origen de la posible discriminación puede ser doble: necesitan cuidados especiales; y no queda bien tener un hijo así, pues está de moda tener hijos guapos. Estas discriminaciones serían de tipo cualitativo -debido a que poseen cualidades distintas-, o racista si se les suprimiera para mejorar la raza.